¿Cómo cuidar mi e-bike?

Cuando barremos nuestra casa durante la limpieza de primavera, no debemos olvidar nuestra joya en el pasillo, el garaje o el sótano: ¡nuestra e-bike!

A más tardar cuando el sol nos llama al exterior y el ciclismo vuelve a ser más divertido después de la estación fría, queremos dejar que nuestro vehículo brille. Podemos dejarnos contagiar por la refrescante inyección de energía de la primavera para sacar brillo a nuestra bicicleta eléctrica y aprovechar para darle un vistazo. De este modo, la seguridad y el placer de la conducción estarán garantizados también este año. Si mantenemos nuestra actitud concienzuda, aumentaremos al máximo la vida útil de nuestra elegante bicicleta.

Seamos sinceros: sienta bien tener nuestra bicicleta tan reluciente que parece nueva, ¿verdad? Exacto no hay nada mejor que estar seguro de que el cambio trasero, los pedales, los cables Bowden y la horquilla de suspensión están en buen estado.

Así que imaginémonos de pie delante de nuestra e-bike, radiantes de satisfacción tras el trabajo realizado, y guardando nuestro kit de cuidados. Ahí es exactamente donde queremos estar, pero primero echemos un vistazo a lo que realmente necesitamos para nuestra “operación limpieza”, y lo que no debe utilizarse bajo ninguna circunstancia.

Hay todo tipo de trucos y consejos secretos que se pregonan pero a nosotros, los entendidos, se nos ponen los pelos de punta sabiendo lo mucho que puedes dañar una bicicleta eléctrica con los consejos equivocados.

Tenemos que alejarnos de intentar acabar lo más rápido posible o dejar que todo brille, más bien debemos proceder de forma profesional. Al fin y al cabo, una e-bike también tiene zonas sensibles y no es un artículo que se compre todos los años…

Especialmente en lo que respecta a nuestra conciencia medioambiental, deberíamos esforzarnos por conservar nuestra e-bike con todos sus refinamientos electrónicos el mayor tiempo posible.

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La siempre popular limpiadora de alta presión

Con tanta potencia te deshará de toda la suciedad en un santiamén, ¡pero también habrás eliminado importantes capas lubricantes y posiblemente habrá bombeado agua al motor de la e-bike! Las juntas pueden fallar, pueden producirse cortocircuitos e incluso se pueden haber transportado partículas de suciedad a lugares donde seguramente no querías que estuvieran.

Detergentes que eliminan la grasa

Los agentes que disuelven la grasa atacan las capas lubricantes esenciales.

El omnipresente chorro de vapor:

Los componentes electrónicos sensibles sufrirán. Además de que eliminará la grasa de la cadena y los cojinetes, lo que en última instancia provocará es corrosión. El final de tu experiencia de conducción suave comienza con una fricción notablemente mayor, y los primeros signos de desgaste se hacen evidentes demasiado pronto.

Mala grasa para todo:

No todas las grasas son iguales. Utiliza grasas que sean capaces de arrastrarse, de lo contrario cualquier suciedad se pegará a la “grasa cualquiera” y su placer de conducción se quedará por el camino.

Limpiadores Rambo agresivos:

Puede ser emocionante cuando la suciedad desaparece casi por sí sola, pero si recurres a productos de limpieza agresivos, no sólo se atacará importantes juntas y plásticos, sino que se pueden destruir muchos más en el proceso. Utiliza sólo los productos adecuados, es decir, productos de cuidado específicos para bicicletas eléctricas.

TENLO TODO PREPARADO:

No hay nada como una buena preparación. Si durante la limpieza pierdes tiempo valioso y, además, mucho tiempo buscando y rebuscando en el sótano, sin duda perderás rápidamente la motivación. Lo mejor que puedes hacer -si no lo tiene todo a mano en un solo lugar- es prepararlo todo primero. Por ello, te ayudamos con la siguiente lista:

• En primer lugar, necesitas un cubo de agua tibia, una esponja (pequeña) y dos cepillos suaves: uno pequeño para los espacios complicados (un cepillo de dientes viejo también sirve) y otro más grande.

• También te recomendamos un jabón para bicicletas eléctricas o, al menos, un jabón para coches.

• Para secarla al final, necesitarás una toalla de tela. Un paño viejo pero limpio es suficiente para absorber el exceso de lubricantes.

• Una regadera puede ser útil para aclarar los detergentes.

• Ten a mano llaves Allen y de boca.

• La grasa para palos o la vaselina técnica son perfectas para mantener los puntos de contacto.

• Ten preparado un limpiador de cadenas.

• Deja tiempo suficiente, deja pasar unos relajados 60 minutos.

EL PROCESO:

• Retira las piezas extraíbles y otros accesorios electrónicos desmontables, incluida la batería. Cualquier otro accesorio electrónico que esté fijado de forma permanente puede cubrirse con láminas de plástico o paños.

• No te olvides de nada: por ejemplo, compruebe los rodamientos del buje, la tija del sillín, la cadena, la horquilla de suspensión con amortiguador y el cuadro.

• Empieza por las ruedas. Les gusta el agua con un chorrito de jabón para coches. Limpia las ruedas con una esponja desde el buje hasta la llanta. A continuación, acláralas con agua.

• Haz lo mismo con el cuadro. Si hay mucha suciedad, deja que el agua caliente con el producto de limpieza lo empape durante un rato. La suciedad empapada puede eliminarse más fácilmente.

• Una vez que hayas eliminado toda la suciedad, puedes ocuparte de cuestiones más complicadas. Después, los eslabones de la cadena necesitan una buena lubricación. Para ello, puedes aplicar una fina capa de aceite para cadenas (utiliza un aceite para cadenas adecuado para bicicletas eléctricas). Empieza por la mitad del recorrido inferior de la cadena para evitar que el aceite llegue al piñón o al freno.

Recuerda: Una gota por cada eslabón de la cadena es suficiente. La cadena no quiere gotear, pero le gusta una buena dosis. Para asegurarse de que todo está bien distribuido, gira lentamente la biela y cambia por todas las marchas. Por último, limpia el exceso de lubricante con un paño limpio.

• Las horquillas de suspensión también necesitan de vez en cuando un poco de grasa fina para suspensión, la cual debes aplicar con cuidado y sólo una fina capa. Si la utilizas con moderación, casi ninguna partícula de suciedad se adherirá a ella.

• Los frenos de disco pueden limpiarse con un paño seco o húmedo. Ten mucho cuidado de no mancharlos de grasa, para que el efecto de frenado siga estando garantizado.

• Los tornillos también deben permanecer libres de grasa (salvo unos pocos que hayan sido tratados con grasa especial), así como la pinza. Los cables de freno de los frenos de llanta pueden reengrasarse de vez en cuando.

• Asegúrate de que los puntos de contacto de la batería estén completamente secos antes de volver a colocarla.

¡HECHO!

¿Has terminado y está satisfecho con tu rendimiento? Nos encantaría calcular tu consumo de calorías, pero da por hecho que después de esta limpieza, te has ganado al menos una tableta de chocolate.

Consejos útiles:

• Si quitas la suciedad inmediatamente después de cada paseo en e-bike, la bicicleta estará siempre en buen estado. Retira antes la batería y limpia los polos del conector.

• Realiza una limpieza general periódica de tu bicicleta eléctrica cada 300-500 kilómetros, en función de los senderos que prefieras y de la frecuencia de sus salidas.

• Adapta las pequeñas y grandes acciones de limpieza a tu comportamiento de conducción. Si es necesario, una limpieza diaria puede ser útil, o mensual…

LO QUE HAY QUE SABER ANTES DE LA LIMPIEZA

No te preocupes por el soporte de la batería del cuadro, es impermeable. Sin embargo, asegúrate de que todos los contactos estén limpios y secos.

Aunque puede decirse que las e-bikes no son muy diferentes de las bicicletas convencionales en lo que respecta a la limpieza, los limpiadores especiales son simplemente más prácticos de usar y pueden limpiar las piezas especiales con mayor eficacia. Además, sólo con el equipo adecuado y los productos de limpieza útiles podrás ir sobre seguro y no dañar las superficies ni los componentes sensibles.

Los limpiadores en spray se encuentran entre los ayudantes más prácticos. Puede utilizarlos para empapar grandes áreas de suciedad y luego limpiarla fácilmente tras el tiempo adecuado.

Las bicicletas eléctricas no son “peleles” y aguantan mucho, pero con unos buenos cuidados puedes aumentar considerablemente su vida útil y su placer de conducción.

Mantén siempre limpia la zona del tapón y, si es necesario, trátala con grasa para postes o vaselina técnica. Cuando utilices cualquier lubricante, asegúrate de no dañar los discos de freno y de que el piñón no se atasque.

En cuanto hayas recorrido entre 300 y 500 kilómetros después de la última limpieza, es el momento de que un profesional realice la siguiente revisión.

También puede ser el momento de la próxima limpieza y lubricación de la cadena. Especialmente si tu e-bike ha estado expuesta al agua salada u otras condiciones meteorológicas especiales, así como al barro y otras suciedades. En estos casos, no debes dejar que nada se seque, sino eliminar todas las impurezas inmediatamente.

En la nieve: Retira siempre el hielo y la nieve -especialmente el rocío salino- de tu bicicleta eléctrica en cuanto llegues a tu destino y déjala secar completamente.

Las pequeñas partículas de suciedad se acumulan fácilmente en los componentes importantes. Esto se aplica tanto a la electrónica, como a la mecánica. Para evitar daños, siempre debes mirar de cerca y, si es necesario, realizar pequeñas operaciones de limpieza.

DEJAR EN “NAFTALINA” UNA E-BIKE DURANTE EL INVIERNO

Si eres uno de esos ciclistas que vuelven al coche o al transporte público en invierno, da una limpieza final a tu e-bike. Como mínimo, debes guardarla limpia; aunque la cadena y otras piezas metálicas también necesitan un poco de lubricación o cuidado.

Retira la batería y la pantalla y guárdalas a temperatura ambiente, es decir, entre 10 y 20 grados. La capacidad de carga de su batería debe estar entre el 30 y el 60 por ciento.

Cuando llegue de nuevo la primavera, es una buena idea echarle otro vistazo a todo. Si lo has hecho todo bien, ¡no hay nada que se interponga en tu primer paseo en e-bike!

NO TE ASUSTES – Consejos de primeros auxilios para tu e-bike:

No hay necesidad de entrar en estado de shock si algo va mal. Un posible escenario de desastre podría ser si entra algo de agua en el soporte de la batería. Afortunadamente, éste está diseñado de forma que el agua pueda escurrirse. Los contactos también están protegidos contra la corrosión mediante un revestimiento especial y sólo necesitan tiempo para secarse completamente. Así que se trata de “esperar y ver”, siempre que ya hayas quitado todo el exceso de agua posible con un paño limpio.

Tu bicicleta eléctrica puede soportar mucho, pero siempre te agradecerá un buen cuidado. Por supuesto, siempre estamos ahí para ayudarte y aconsejarte. Nuestros expertos en e-bikes estarán encantados de darte valiosos consejos y también te esperan en nuestro taller, si es necesario.

Si estás chorreando sudor delante de tu e-bike, ¡llámanos!. Probablemente podremos decirte que el problema es menor de lo que piensas. Y si no, nuestra puerta del taller está abierta para ti.

Como la seguridad siempre está en lo más alto de nuestra lista de mantenimiento, te recomendamos la atenta mirada y las manos experimentadas de un profesional en caso de duda. Enséñanos tu bicicleta y te diremos si puedes o no arrancar con tranquilidad.

Con esto en mente, te deseamos una bicicleta eléctrica que parezca nueva, ¡y muchos años más de placer de conducción sin defraudar!